Una rutina de cuidado de la piel infalible para crear la piel que siempre has soñado
Por muy buena que sea tu genética, no basta con nacer con una piel fantástica para estar siempre radiante. Hay que cuidarla. Nutrirla y protegerla. Y tienes que darte cuenta de que una piel bonita y sana es algo que depende de ti. Sí, es posible "crear" la piel con la que siempre has soñado si adoptas hábitos saludables y sigues tu rutina de cuidado de la piel de forma constante, con los productos adecuados.
Dónde empieza una piel bonita
Como todo, la salud y la belleza de la piel se basan en factores relacionados con nuestro estilo de vida: las horas que dormimos, la cantidad de agua que bebemos, el estrés al que vivimos, la forma en que comemos y los niveles de contaminación a los que estamos expuestos. Además de todo esto, e independientemente de nuestro tipo de piel, es esencial seguir una rutina diaria de cuidados sencilla y fácil de aplicar para mantener nuestra piel siempre en forma y radiante.
Pero, ¿cómo poner en práctica esta rutina? De nada sirve tener un arsenal de productos de belleza, mascarillas milagrosas, exfoliantes y peelings, si no seguimos estos tres pasos mágicos: limpiar, tonificar e hidratar. Son una especie de "no brainer" para la rutina de cuidado de la piel, sencillos, rápidos y súper eficaces, sobre todo si los sigues con constancia (para eso sirven las rutinas: crean buenos hábitos).
Conoce tu tipo de piel
Pero primero, lo básico. Todo empieza por conocer tu tipo de piel. Básicamente, existen 4 tipos de piel: muy seca a seca (tipo de piel 1), mixta a seca (tipo de piel 2), mixta a grasa (tipo de piel 3) y grasa (tipo de piel 4). Comprender las características de tu piel, su comportamiento (por ejemplo, ¿cómo sientes tu piel por la mañana? ¿y a mitad del día?), escuchar a tu piel y respetarla es el primer paso para conseguir la piel con la que siempre has soñado. De este modo, podrás encontrar los productos más adecuados para tu piel, que es única e irrepetible, como sabemos, y utilizarlos en tu rutina diaria.
1. Piel limpia, piel bonita
Así es. Una piel increíble empieza por una piel limpia. Este es el primer paso de una rutina infalible de cuidado de la piel, y nuestra recomendación es utilizar un aceite limpiador, que limpia en profundidad, eliminando el maquillaje, la contaminación y las impurezas sin dañar la piel. Limpia tu piel mañana y noche con una toalla facial de algodón 100% orgánico, y no temas, incluso las pieles más grasas agradecerán esta limpieza profunda y suave. A toalla de algodón exfoliará suavemente la piel, dejándola lista para el siguiente paso.
Tipo 1: Aceite Limpiador y Desmaquillante de Jazmín
Tipo 2: Aceite Limpiador y Desmaquillante de Jazmín
tipo 3: Aceite Limpiador y Desmaquillante de Camelia
tipo 4: Aceite Desmaquillante y Limpiador de Camelia
Pruebe nuestro aceite desmaquillante limpiador Jazmíny si tienes la piel más sensible y reactiva, descubre el nuestro, Cameliacon camellia japonica, que limpia la piel sin dañarla y además ayuda a equilibrar el pH. Limpia tu piel mañana y noche con la toalla facial de algodón 100% orgánico, y no temas, incluso las pieles más grasas agradecerán esta limpieza profunda y suave.
2. Esencia
El siguiente paso es la esencia, que calma y refresca la piel mientras la prepara para la siguiente etapa, ayudando al sérum, con sus activos botánicos, a penetrar bien en la piel. Cada esencia tiene una función específica (por ejemplo, calmar y controlar la grasa, o dejar la piel súper fresca y radiante), por lo que debes elegir la que mejor se adapte a tu tipo de piel.
TIPO 1: Esencia de Rosa e Esencia Revitalizante
tipo 2: Esencia Sandía, Esencia revitalizante e Esencia Radiante
tipo 3: Esencia de Azahar e Esencia Radiante
tipo 4: Esencia de pepino, Esencia de Hamamelis e Esencia Radiante
3. Mima tus ojos
Los ojos son una zona súper sensible que requiere cuidados especiales, y a menudo olvidamos lo importantes que son. Para dar a tus ojos la atención que se merecen, e independientemente de tu tipo de piel, querrás probar el Eficaz: Suero Concentrado Efecto Liftingpara el contorno de ojos (y otras zonas delicadas, como la piel alrededor de la boca).
4. Nutre la piel
Aquí viene lo más destacado: el sérum facial, que es una auténtica vitamina para la piel y puede aplicarse mañana y noche, siempre sobre la piel limpia. Es en este concentrado de belleza donde todos los activos botánicos que utilizamos se manifiestan en todo su esplendor. Al penetrar en nuestra piel, ésta absorbe cada ingrediente, aprovechando al máximo todos los activos botánicos de la fórmula, por eso es tan importante preparar bien la piel previamente (limpieza y esencia) para que esté receptiva a todas estas maravillas. Una vez más, la elección del sérum adecuado depende del tipo de piel, ya que cada fórmula responde a necesidades diferentes. He aquí nuestras sugerencias:
Tipo 1: Sérum Detox e Suero Revitalizante
tipo 2: Suero Puro Sol, Suero revitalizante, Suero Radiante e Sculpt Serum
tipo 3: Suero iluminador, Suero Radiante e Sculpt Serum
tipo 4: Serum Reparador, Suero Cósmico de Noche e Suero Radiante
5. Hidratar y cuidar
Y por último, la crema. Esa delicia para la piel, en la dosis justa, y adaptada a las necesidades específicas de cada tipo de piel e incluso de zonas concretas. Incluso las que tienen la piel mixta o grasa no deben saltarse este paso. Y es que cuando se deshidrata, la piel grasa tiende a producir más sebo para estar más hidratada, ¡y esto crea el efecto contrario!
A diferencia del sérum, que penetra en la piel, la crema hidratante se queda más en la superficie. Además de sus funciones hidratante y nutritiva, la crema actuará sobre problemas muy específicos, como las manchas o el envejecimiento cutáneo. Encontrar la crema hidratante adecuada que responda a las necesidades de tu piel y la deje contenta, sin exagerar, es la clave.
Tipo 1: Crema Regenera e Crema Revitalizante
Tipo 2: Crema Regeneradora, Crema Revitalizante e Crema Radiante
Tipo 3: Crema Regeneradora e Crema Radiante
Tipo 4: Crema Regeneradora e Crema Radiante
Encuentra la crema que tu piel necesita: Radiant, una fabulosa crema antimanchas con bakuchiol, la alternativa natural al retinol, es excelente para mejorar la textura de la piel y favorecer la regeneración estimulando la producción de colágeno. Si buscas un delicioso producto antiedad, prueba Crema antiedad Revitalisecon vitamina C, A y enzimas, para reafirmar y redensificar la piel, con una textura increíble.
6. Proteja
Un último consejo muy importante para hacer cada mañana: protege tu piel de los rayos UVA/UVB. El fotoenvejecimiento es la principal causa de arrugas y manchas en la piel, así que nunca se es demasiado precavido. Para disfrutar de toda la luz y el calor del sol (y de otras fuentes de luz no deseada, como las pantallas de ordenador) y seguir estando protegida y radiante en todo momento, te recomendamos nuestro Puro Sol Zinccon protección SPF 30+, con acción antiedad que favorece un bronceado luminoso. Formulada con activos botánicos y zinc no nano, combina lo mejor de ambos mundos: reparación intensiva y protección solar.