Iluminadores corporales Mar e Sol dejan la piel resplandeciente, súper suave e hidratada.
¿Qué les da su brillo natural?
Ambos tienen Mica, un mineral natural difusor de la luz, que da este maravilloso brillo que favorece a cualquier tono de piel. Un brillo sedoso y soleado no sólo en verano, sino en cualquier época del año. Es agradable saber que nos cuidamos de forma natural, sostenible y sin microplásticos.
¿Cómo se utiliza?
Sólo hay que agitarlo bien antes de usarlo.
Ambos pueden aplicarse como crema hidratante diaria después de la ducha (en todo el cuerpo), o a lo largo del día para realzar la luminosidad de determinadas zonas.
¿Cuál elegir?
Ambos actúan para aportar luminosidad y son adecuados para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles.
¿Cuál es la diferencia? O Sol termina actuando como un bronceado naturaldando un color claro a la piel. Por lo tanto, es más intenso y perfecto para las pieles más oscuras o para quienes buscan un bronceado luminoso.
OMar sólo da la luminosidadsin factor de color. Ambos proporcionan una piel sedosa y funcionan de maravilla en pieles apagadas y/o deshidratadas, gracias a sus activos que nutren la piel desde el interior.
También es importante recordar que ambos son 100% naturales y están compuestos por activos botánicos que combaten la deshidratación, el envejecimiento, las estrías, la falta de elasticidad y las cicatrices.
¿El resultado? Piel más luminosa, firme, lisa e hidratada al instante con un brillo dorado para un aspecto saludable y radiante. Y lo mejor de todo es que se absorbe rápidamente y se funde con la piel.
Mar: Aceite de pasionaria, aceite de baobab y lima persa.
Los supercomponentes de estos aceites no han sido elegidos al azar y su función le proporciona algo más que una piel increíblemente brillante. El aceite de fruta de la pasión tiene un alto contenido en ácido linoleico, que desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de una piel sana. Además, tiene propiedades antioxidante y protector de la piel que ayudan a neutralizar los daños del sol y a proteger la piel. revertir los signos del envejecimiento causada por la acción de los radicales libres. Gracias a las intensas vitaminas que contiene, el aceite de baobab nutre la piel, revitaliza las células envejecidas y da a la piel un apariencia juvenil. Por último, la lima persa ayuda a mantener la piel hidratada y sana.
Sol: Aceite de semillas de frambuesa y aceite esencial de yuzu.
El aceite de semillas de frambuesa es uno de esos aceites que traen a la mente una imagen de dulzura, asociada al recuerdo de un día de verano. Extraído en frío aporta importantes beneficios a la piel: es hidratante, oclusivo, antiinflamatorio y antioxidante¡! Además, el aceite de semillas de frambuesa ofrece beneficios antienvejecimiento al mejorar la elasticidad, la hidratación y la flexibilidad de la piel, a la vez que alisa y suaviza su aspecto.
El aceite esencial de yuzu, que también forma parte de nuestro sol, es muy apreciado en la cosmética natural japonesa, por su potencial potencial antioxidante, rejuvenecedor y antienvejecimiento en la piel.
Tener un cuerpo de verano bien puede tener que ver con la confianza (y el increíble brillo) que el aceites iluminadores a nuestra piel durante los meses más cálidos. Si la idea de una piel dorada y brillante le atrae, entonces querrá optar por uno (o tal vez ambos) de estos maravillosos aceites.